¿Quién soy? ¿Quién soy?

Hola soy Carmen creadora de Happy Zapas.

Estoy muy feliz de que hayas llegado hasta aquí, así me puedes conocer un poquito mejor y los entresijos que hay detrás de esta locura de pintar zapatillas, pues pasas de estar pintando un bebé a preparar un pedido de algún Súper héroe.

Ésta es mi vida, una locura maravillosa, en la que me envuelvo de historias, vuestras historias.

Las hay de enamorados, te cuentan cómo se conocieron, dónde fue su primer beso, otras como las ilusiones de una futura bailarina, futbolista, un amante del cine, o historias tristes, aunque muy gratificantes cuando pinto a un fiel amigo perruno que ya se fue y queda reflejado su retrato en las zapatillas.

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¿Cómo empecé? ¿Cómo empecé?

Pintando cuadros y haciendo murales.

Mi primer cuadro fue un bodegón una simple cebolla y un cuchillo, pero amigos, ahí se despertó en mí algo muy especial y muy bonito.
(Anécdota)
Seguí y seguí probando, madre mía ¡los lienzos que he llegado a estropear!
Hasta que llegué a ir creando cositas decentes, bueno ya lo de la cebolla y el cuchillo moralmente lo superé, aunque siempre lo guardaré con mucho cariño en mi corazón.
Así que probé a pintar cuadros de artistas consagrados como Dalí, Monet, Picasso…
Ahí aprendí mucho, sobre todo en las técnicas y a entender la envergadura de dichas obras, increíble el arte que nos han dejado.
Una vez pasados unos 20 años, que se dice pronto, experimenté a pintar miniaturas, y de ahí el nacimiento de Happy Zapas

Entonces probé a pintar unas zapatillas, y la sorpresa fue mía cuando todos mis amigos y familia me animaron a continuar.

Aunque se estropearon en menos que canta un gallo, pues la pintura que utilicé fue acrílica y con los lavados se fue borrando

Pero mi tenacidad me empujo a seguir y mi pasión por el arte, así que destrocé tantos pares de zapatillas como anteriormente lienzos.

Creo que al ser tan persistente el Karma me premió y me dio la oportunidad de crear Happy Zapas de una manera profesional con muchísimo esfuerzo e ilusión.

No puedo dejar de nombrar a toda mi familia, amigos y clientes que no dudaron de mí en todo momento.

Y agradecer en especial a mí más fiel de las amigas Janira, la cual le corresponde un mérito importantísimo pues ella ha creado y ha aportado muchísimas ideas y diseños en hacer que este micro mundo nuestro crezca.

Estoy muy feliz de que hayas llegado hasta aquí, así me puedes conocer un poquito mejor y los entresijos que hay detrás de esta locura de pintar zapatillas, pues pasas de estar pintando un bebé a preparar un pedido de algún Súper héroe.

Ésta es mi vida, una locura maravillosa, en la que me envuelvo de historias, vuestras historias.

Las hay de enamorados, te cuentan cómo se conocieron, dónde fue su primer beso, otras como las ilusiones de una futura bailarina, futbolista, un amante del cine, o historias tristes, aunque muy gratificantes cuando pinto a un fiel amigo perruno que ya se fue y queda reflejado su retrato en las zapatillas.